Operación estraperlo 2

Operación estraperlo está en su segunda edición. Es un claro motivo para pensar que realmente este libro merece ser leído. Ese es mejor reclamo que el que yo pueda expresar con estas líneas. Aun así, os daré algunas razones más por la que animo a aventurarse por sus páginas.

Recordemos por un momento La ciudad que no sueña. (Edit. Canto y Cuento, 2018). En ella, el inspector Castilla y el subinspector Romero les solucionaron la papeleta a Ramón Clavijo Provencio y a José López Romero, sus autores, aclarando el problema que tenían estos dos escritores con un cadáver en un tonel de vino, justo cuando estaba a punto de llegar Francisco Franco a Jerez en Mayo de 1943. Ahora, con Operación Estraperlo, es la segunda vez que la editorial Canto y Cuento le pide a Ramón Clavijo y a José López que, por favor, se pongan en contacto con los policías Castilla y Romero para que éstos les echen una mano y puedan aclarar una serie de dudas que les han surgido.

¿Había relación entre el Manifiesto de los 27 procuradores en Cortes (1943) y el Manifiesto de Estoril (1947), año este último donde se desarrolla la novela? ¿Porqué el título de Operación estraperlo? ¿Qué relación había entre los escritores Manuel Halcón y José María Pemán para que éste invitara al sevillano a su finca El Cerro? ¿Un cadáver con un disparo en la sien podía estar relacionado con un accidente en la calle Honda entre una furgoneta y una bicicleta?

Si el libro La ciudad que no sueña estaba inspirado en personajes y en sucesos reales, Operación estraperlo también: José María Pemán, Julián Pemartín, el escritor Manuel Halcón o Manuel Esteve, hacen un "cameo" en esta novela. Antes fue la visita Franco y ahora es la llegada a Jerez de Miguel Primo de Rivera, más concretamente de sus restos mortales, que serían trasladados de Madrid a Jerez, a la iglesia de la Merced. En la comitiva personajes relevantes de la época, que pronto convierten la ciudad en centro de intrigas políticas.

En las páginas de esta novela también descubriremos, como Castilla y Romero se han hecho buenos conocedores de nuestros vinos. Y es que estos policías no desaprovechan la ocasión de mostrarnos las bondades de nuestras bodegas y tabancos, mientras tratan de aclarar quien está detrás del muerto aparecido en la calle Honda.

Pero sobre todo, leer Operación estraperlo es sumergirnos en la historia de nuestra ciudad, recorrer aquellos lugares que sus autores nos describen e imaginarlos, no como están ahora sino como fueron concebidos en su momento. Los autores aprovechan cada movimiento del inspector Castilla y del subinspector Romero para darles un paseo por las calles de Jerez y, cuando estos están en silencio, nos describen, con maestría, la belleza de algunos de sus edificios, como el que albergaba la Biblioteca Municipal, por entonces en la plaza Revueltas y Montel, hoy Asunción, o la Estación de ferrocarril.

Juan Luis Sánchez Villanueva. Centro de Estudios Históricos Jerezanos